Luego del compulsivo desalojo policial del corte de ruta con balas de goma y heridos, finalmente familias de La Cuvita tendrán luz en su asentamiento. Anoche también fueron liberados los dos detenidos en la comisaría de Aguaray: el cacique Rogelio Segundo y el dirigente Mario Segundo.
La respuesta a la demanda de energía eléctrica para el asentamiento nuevo de familias wichis evacuadas de La Curvita vieja en Santa Victoria Este, tuvo sus costos altos, con detenidos y decenas de heridos con balas de goma por el despeje violento de la ruta por parte de la Infantería.
Confirmando la premisa que nada se consigue sin la lucha, despues de la dura represión, ayer llegó a La Curvita Nueva, un grupo electrógeno gestionado por la ministra Edith Cruz, para dar clases nocturnas en las aulas móviles como una solución de emergencia ante la falta de respuesta de las áreas correspondientes.
Dijeron que el grupo electrógeno será una solución provisoria hasta tanto la próxima semana, lunes o martes, se instale en el nuevo asentamiento el alumbrado público.
Desde Asuntos Indígenas también se dejó en claro que el desalojo compulsivo no fue ordenado por este ministerio, y que la ministra se enteró del despeje policial de la ruta por los medios de comunicación.
Remarcaron que desde hace tiempo se gestionó ante el área que corresponde el pedido de energía de la comunidad en cuestión. Se aclaró ademas que esta área no tiene la competencia de realizar este tipo de obras electricas que demandaban las familias damnificadas por el desborde del Pilcomayo.
Liberan a los dos detenidos
Asimismo, anoche a última hora mediante los trámites de rigor ante la fiscalía de funcionarios y abogados de Asuntos Indígenas, se logró la liberación de los hermanos Rogelio y a Mario Segundo, después de ser indagados por el juez Nelso Aramayo.
Luego de ser detenidos tras los disturbios por la toma de la ruta 54, se les abrió una causa acusados de resistencia a la autoridad e interrupción de las vías de comunicación.
Ambos dirigentes regresaron anoche a reencontrarse con sus hermanos indígenas de La Curvita Nueva, donde todavía mas de un centenar de familias viven hace más de cuatro meses en condiciones de extrema precariedad, sin los servicios básicos y en lo que puede llamarse “taperas”, bajo carpas de plástico.
Fondos para la construcción de La Curvita nueva
Mediante un convenio entre Nación y Provincia se destinarán fondos para la compra de materiales de construcción para mejoras habitacionales a familias de La Curvita y de otras comunidades de Santa Victoria Este, afectadas por el desborde del río Pilcomayo en enero pasado.
Serán 2.500.000 pesos, sumados al aporte provincial de 5 millones, para la compra de materiales de construcción, entre los que figura; chapas, tirantes, aberturas, ladrillones, cemento, cal, arena, entre otros.
Entre el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación y el Ministerio de Asuntos Indígenas y Desarrollo Socia de Salta, con estos fondos se atenderá la emergencia en la que viven varias comunidades en Santa Victoria Este.
La ministra Edith Cruz, hizo foco en la necesidad de la comunidad de La Curvita, paraje destruido y que quedó inabitable por los constantes desbordes del rio Pilcomayo. Se comprará materiales y se trabajará junto a las comunidades en la construcción de lugares más adecuados para que vivan más de 400 familias afectadas.
Fuente: Nuevo Diario de Salta