Miles de mujeres se movilizaron al Congreso de la Nación conmemorando el tercer aniversario de la primera marcha bajo la consigna “Ni Una Menos”, en una concentración que estuvo fuertemente marcada por el reclamo de la legalización del aborto, proyecto de ley que la Cámara de Diputados discutirá el próximo miércoles 13.
Al igual que este domingo, las manifestantes se reunieron en las inmediaciones del Parlamento portando los pañuelos verdes distintivos del pedido por la legalización del aborto y también cortaron otras arterias del microcentro provocando problemas de tránsito.
De las concentraciones participaron agrupaciones políticas, sociales y sindicales, como las dos CTA y distintos gremios pertenecientes a la CGT, además de colectivos feministas que bregan contra el fin de los femicidios y la aplicación en su totalidad de la ley de Educación Sexual, entre otras reivindicaciones.
Por otra lado, la marcha se replicó en distintos puntos del país como Mendoza, Rosario y Córdoba, donde miles de mujeres se dieron cita en sitios emblemáticos de esas ciudades.
“Aborto legal por todas las que murieron por intentar“, rezaba una de las pancartas en la manifestación. “Sin aborto legal no hay ni una menos”, señalaba otra. “La cantidad de ropa que uso no determina la cantidad de respeto que merezco”, declaraba un gran cartel verde.
“Estamos gritando porque todavía ganamos un 27 por ciento menos que los hombres, porque si sufrimos un acoso o violencia nos preguntan si llevábamos minifalda, pedimos aborto seguro y gratuito en el hospital público”, enumeró en tanto una joven presente en la marcha. “Vivas nos queremos, ni una menos”, corearon los manifestantes.
Algunos sectores se pronunciaron sin embargo en contra de sumar el reclamo a favor del aborto a la marcha en repudio a la violencia machista.
Jimena Aduriz y Verónica Camargo, mamás de dos jóvenes víctimas de feminicidios, solicitaron a los organizadores de la convocatoria que respeten el espíritu de este grito colectivo y llamaron a los diputados a ser “conscientes” de la vida en juego del niño o niña por nacer.
Aquel 3 de junio de 2015, decenas de miles de personas salieron a las calles en Buenos Aires y distintos puntos del país para repudiar el femicidio de una adolescente de 14 años. La joven fue asesinada a golpes por su novio de 16 años, quien la enterró en el patio de la casa de sus abuelos en la provincia de Santa Fe.