Hoy ataja para la reserva y primera de liga del Club Atlético San Martín de Tucumán, cree en sus ideales, respeta sus sueños y lucha por conseguirlos.
Néstor “Chicho” Tonini se instaló a los 13 años en San Miguel de Tucumán, el primer equipo en el que jugó solo unos pocos meses apenas llegó a la vecina provincia fué el Centro de Educación Física 18 -CEF 18- pero luego se trasladó al Club Atlético San Martín.
Mientras transcurría su niñez en Salta pasó por la escuela de fútbol infantil de Gimnasia y Tiro -GyT- “quiero agradecer a quien fue mi profesor de arqueros en el club -por GyT- a Claudio Caro, fue él quien me hizo creer en mi y que me ablando por así decirlo, por que si no fuera por el hoy no jugaría ni a la bolilla”, además Chicho nos cuenta que “estuvo en San Antonio pero por un tema de papeles no se pudo concretar que jugue oficialmente en la Villa”.
Con apenas 19 años recién cumplidos ya está palpando los premios de su esfuerzo, constancia y dedicación: “gracias a Dios tuve la oportunidad de ser parte del plantel que ascendió a primera, por la lesión de Cristian Correa -arquero suplente- me subieron y entrene con el plantel profesional del club”, resalta Tonini.
En esa oportunidad además conoció a uno de sus ídolos Claudio “Taca” Bieler “compartimos algún que otro entrenamiento, el es un jugador con una trayectoria mas que admirable y muy profesional”, explica el muchacho.
Néstor es un engranaje indispensable en un equipo dónde ataja desde el 2013, con un largo camino por recorrer el joven arquero alienta a otros niños y adolescentes que se encuentran en el camino del deporte para que “tengan fe, y nunca bajen los brazos, si uno piensa en positivo atrae cosas positivas”.