Una joven madre fue a la justicia en el Distrito Sur para buscar ayuda por una situación de conducta de su hijo a mediados del año 2022.
La mujer y sus tres hijos de entre 10 y 13 años de edad, hoy se encuentra privada de poder tenerlo consigo. Falta de respuesta de la Asesoría de Menores, del Juzgado de Violencia Familiar y de Género y la decisión que viene.
Para junio de 2022, en la Asesoría de Menores e Incapaces 2 del Distrito Judicial del Sur, una madre acudió en ayuda por una situación de conducta de su hijo mayor, pero nunca imaginó lo que le terminaría sucediendo. En ese organismo, confeccionaron un Acta de Mediación donde las autoridades entregaron sus hijos a una tercera persona que hoy, sin mayores controles. “Sería por tres meses, me indicaron, pero estamos a marzo de 2023 y sigo sin poder tener a mis hijos conmigo”, detalla la madre, que prefiere resguardar su identidad.
“Me dijeron que no podía tener más a mis hijos, si no conseguía una casa con una habitación para cada uno de ellos”, manifiesta, y agrega “Fui al Poder Judicial pensando que podían ayudarme, pero no hubiera pensado jamás que me vería privada de tener a mis hijos conmigo”. “Tengo un microemprendimiento, la verdad es que eso hoy no está a mi alcance ni el de mi familia”, cuenta.
“Expuse un problema, y quería encontrar en las autoridades judiciales una solución, una escucha”, dice. “Pero no puedo más, me privaron de mis hijos, y a ellos de mi cuidado de madre, hoy están sufriendo más que nunca”, explica.
Una justicia sin respuestas
A comienzos de febrero de 2023, se presentó ante la misma Asesoría de Menores una petición para que se modifique aquella decisión de ese organismo que entregó a los tres niños, pero transcurridos más de cuarenta días, el organismo que participa en la protección de derechos de niños, niñas y adolescentes, no buscó resolver rápidamente la angustia de esta pequeña familia. Tampoco se ha convocado a las partes para ser escuchadas por el Juzgado de Violencia Familiar y de Género, al cual le fue girado el caso. Mientras tanto, el tiempo sigue transcurriendo.
“Es una muestra más de una justicia fría y que no escucha”, dice el Dr. Víctor Gomes, quien patrocina a la madre de los niños. “Una justicia deshumanizada no nos sirve a los ciudadanos”, reflexiona y alerta “muchas veces vemos falta de criterio técnico en la justicia, pero esto es falta de criterio humano”. “Exigirle a una madre una casa con tres habitaciones o se verá privada de sus hijos es una locura”, agrega.
Ahora la decisión es de la Jueza Bosernitzan
El caso ha llegado en los últimos días al Juzgado de Familia de la localidad del sur de Salta y será la Jueza Frida Bosernitzan quien decida la situación de los tres niños privados del contacto con su madre.
“Siempre podemos dar un cauce justo y protector de los derechos de los sectores más vulnerables, sobre todo cuando este grupo poblacional – los niños, las niñas y adolescentes – tienen una protección especial, constitucional y convencionalmente que, en el caso, se ha pasado por alto”, expresa el Dr. Víctor Gomes. “Aquí esperamos encontrarlo, la solución justa tiene que llegar”, sostiene.