La medida, respaldada por la ordenanza 6317, fue promulgada por el intendente Walter Vuoto y busca salvaguardar a los ciudadanos de las radiaciones asociadas con la quinta generación de comunicaciones.
La capital de Tierra del Fuego, se une a una creciente lista de municipios argentinos que han optado por prohibir la tecnología 5G, citando preocupaciones sobre posibles riesgos para la salud.
La ordenanza establece a Ushuaia como una “zona libre de radiaciones provenientes de la tecnología 5G y generaciones subsiguientes“, insistiendo en la necesidad de estudios médico-científicos y epidemiológicos que garanticen la seguridad antes de permitir la instalación de antenas. La iniciativa, impulsada por la agrupación “Ciudadanos Organizados para Regular las Telecomunicaciones (Corte)”, refleja preocupaciones a nivel nacional e internacional.
Entre los fundamentos de la prohibición, se destaca la falta de estudios en Argentina que aseguren la inocuidad de las radiaciones de las radiofrecuencias provenientes de las telecomunicaciones celulares a largo plazo. La asociación Corte, durante el debate legislativo, resaltó ordenanzas similares en estados municipales de todo el mundo y mencionó regulaciones similares en otros lugares de Argentina.
El proyecto también ha llegado al Concejo Deliberante de la ciudad de Río Grande, en el norte provincial, donde se encuentra actualmente bajo análisis. Las compañías adjudicadas para el desarrollo del 5G en Argentina, incluyendo Telecom, Claro y Movistar, han recibido la formalización del Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom), con una inversión proyectada de alrededor de u$s1.000 millones cada una.
En cuanto a los riesgos para la salud y el ambiente, la Organización Mundial de la Salud (OMS) indicó en 2020 que no se ha relacionado causalmente ningún efecto adverso para la salud con la exposición a tecnologías inalámbricas, aunque se reconoce la escasez de estudios específicos en las frecuencias de 5G.
A nivel geopolítico, países como Reino Unido, Australia, Nueva Zelanda y Canadá han prohibido el desembarco de Huawei por razones de seguridad, destacando un enfoque diferente en comparación con las preocupaciones de salud o ambiente asociadas con la tecnología 5G.