El contraste más fuerte se ve en Formosa, que lidera el ranking nacional tras un incremento de casi 38 puntos, pasando del 29,7% al 67,6%.
El reciente informe sobre el índice de pobreza del primer semestre de 2024 expone un panorama sombrío para Argentina, con una alarmante tasa nacional del 52,9%.
Sin embargo, dentro del duro contexto que atraviesan las provincias del norte, Salta emerge como la “menos pobre” del NOA, con un 52,2% de pobreza, superando en este aspecto a sus vecinas Jujuy (55,7%), Tucumán (55,8%), Catamarca (55,9%) y Santiago del Estero (64%).
El NOA y NEA son las regiones más castigadas, con cifras devastadoras como el 67,6% en Formosa o el 76,2% en Chaco.
Pero Salta, aunque lejos de estar en una situación favorable, ha logrado mantenerse en niveles “más bajos” en relación con sus vecinas e incluso frente a otras provincias argentinas como Buenos Aires (59,7%) y Entre Ríos (65,8%).
Aun así, no todo es positivo: el salto en la pobreza salteña es innegable, aumentando 14,7 puntos en un año.
La provincia cerró 2023 con un 37,5%, lo que muestra que, pese a su comparación relativa, el golpe de la crisis económica ha sido brutal para los salteños.