Los consumidores argentinos enfrentaron en el primer mes del 2025 una fuerte diferencia entre lo que pagan en la góndola y lo que recibe el productor.
Según el Indicador de Precios en Origen y Destino (IPOD) de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), los agroalimentos se encarecieron 3,8 veces desde el campo hasta el comercio minorista. En otras palabras, por cada $1 que cobró el productor, el consumidor desembolsó $3,8.
¿Quién se lleva la mayor tajada del precio?
Los productores apenas captaron el 22,7% del valor final del producto, aunque este porcentaje creció un 8,1% respecto a diciembre.
El pollo (49,8%) fue el producto con mayor participación del productor en el precio final, mientras que la zanahoria (7,9%) quedó al fondo de la tabla.
A esto se suman factores que presionaron aún más la brecha:
•Consumo en baja por el período vacacional.
•Clima adverso que afectó la producción.
•Altos costos de producción, logística y comercialización.
•Apertura de importaciones, lo que golpeó a los productores nacionales.
Frutas y verduras, las más golpeadas
El informe de CAME detalla que en el caso de frutas y hortalizas, los precios aumentaron 6,3 veces desde el campo hasta la góndola, aunque mostraron una leve mejora (-8,7%) respecto a diciembre.
Los productos con mayores diferencias fueron:
•Zanahoria: 12,6 veces (subió 4,3% en góndola, pero cayó 17,9% en origen).
•Naranja: 9,8 veces (su precio bajó en origen por importaciones, pero aumentó en el mercado).
•Manzana roja y pera: 6,9 veces.
• Zapallito: 6,6 veces (subió 10,2% en góndola).
Por otro lado, los alimentos de origen animal tuvieron una brecha menor, con un promedio de 3 veces del productor al consumidor.
¿Cómo impacta en tu bolsillo?
Este desfasaje de precios no solo afecta a los productores, sino también a los consumidores, que terminan pagando costos inflados en un mercado donde la intermediación no quiere resignar ganancias.
📢 Seguinos en redes sociales para más informes sobre la economía que impacta en tu vida diaria.