La privatización de los trenes de carga en Argentina suma un nuevo protagonista: Grupo México, uno de los conglomerados ferroviarios más importantes de América Latina, confirmó su interés en participar del proceso licitatorio por las líneas Belgrano Cargas y San Martín.
El grupo, que actualmente opera la principal red de ferrocarriles de México y Florida y se prepara para abrir una línea en Texas, transporta más de 100 millones de toneladas anuales. Entre sus socios estratégicos se encuentra Union Pacific, considerada la compañía ferroviaria más grande del mundo.
De concretarse su participación, el desembarco de Grupo México podría implicar una inversión cercana a los 3.000 millones de dólares, con el objetivo de quedarse con todos los tramos de los ramales y sus áreas operativas. La compañía proyecta prestar servicios principalmente a los sectores de energía, minería y agroexportación.
El Belgrano Cargas atraviesa las provincias de Santa Fe, Entre Ríos, Córdoba, Tucumán, Salta y Jujuy, mientras que el San Martín conecta Buenos Aires, La Pampa, Mendoza, San Luis y el sur de Córdoba. Ambos ramales son estratégicos para la salida de granos, minerales y productos industriales hacia los puertos del país.
En paralelo, las principales cerealeras del puerto de Rosario (Bunge, Cargill, ACA, AGD, Dreyfus y Cofco) acordaron presentar una oferta conjunta para competir por el Belgrano Cargas. Según estimaciones del sector, controlar el ramal podría representar un ahorro del 20% en los costos logísticos. Estas firmas también realizaron adelantos para la compra de nuevos vagones de transporte agrícola.
Las empresas mineras, por su parte, ven en el Belgrano Cargas una vía clave para exportar litio, cobre, oro y plata desde el noroeste argentino hacia los puertos.
El proceso de privatización, iniciado formalmente en febrero de este año, prevé una desintegración vertical del sistema ferroviario: las vías, la operación y los talleres se licitarán por separado. La inversión necesaria para modernizar la infraestructura se estima en 800 millones de dólares.
Las convocatorias para la licitación se concretarían entre fines de noviembre y comienzos de diciembre, y las adjudicaciones definitivas se conocerían en marzo de 2026, según fuentes del sector.
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