Récord histórico de suicidios en Argentina: Los jóvenes son los más afectados en un contexto de crisis económica y laboral

Con más de 4.200 muertes registradas en 2024, Argentina alcanza el nivel más alto de suicidios desde que existen estadísticas oficiales. Especialistas advierten que la pérdida del poder adquisitivo, la precariedad laboral y la falta de perspectivas golpean con mayor intensidad a los jóvenes.
El país atraviesa una de las crisis de salud mental más graves de su historia reciente, atravesada por un deterioro sostenido de las condiciones económicas y laborales. Durante 2024 se registraron 4.249 suicidios en todo el país, lo que equivale a una muerte cada dos horas, según datos del Sistema Nacional de Información Criminal (SNIC) del Ministerio de Seguridad.
La tasa nacional alcanzó las 9 muertes por cada 100.000 habitantes, superando por primera vez el promedio mundial estimado por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
El impacto es particularmente fuerte entre los jóvenes, un sector que enfrenta mayores niveles de precarización laboral, dificultades de inserción en el mercado de trabajo y una pérdida sostenida del poder adquisitivo.
Especialistas señalan que la incertidumbre económica, la imposibilidad de proyectar un futuro estable y el desgaste emocional asociado a la inestabilidad funcionan como factores que profundizan la angustia y la desesperanza.
En este contexto, el suicidio se convirtió en la principal causa de muerte violenta en Argentina, por encima de los siniestros viales y los homicidios.
A su vez, el Sistema Nacional de Vigilancia de la Salud (SNVS) del Ministerio de Salud informó un promedio de 22 internaciones diarias por intentos de suicidio, lo que revela que por cada persona que muere, al menos otras dos intentaron quitarse la vida.
A las dificultades económicas se suma un escenario cultural complejo. La presión por alcanzar modelos de éxito individual, amplificados por las redes sociales, refuerza expectativas irreales vinculadas al consumo, la autosuficiencia y la estabilidad inmediata. Para muchos jóvenes, la brecha entre esas expectativas y la realidad cotidiana se traduce en frustración y malestar emocional.
La Organización Mundial de la Salud advierte que el suicidio es prevenible si se interviene de manera temprana sobre los factores de riesgo. Sin embargo, aunque se registra un aumento sostenido de consultas por depresión y ansiedad, los recursos destinados a la prevención y a la atención en salud mental resultan insuficientes frente a la demanda creciente.
A esto se suma el estigma persistente en torno a los trastornos mentales, que retrasa la búsqueda de ayuda y dificulta la detección temprana.
Otro punto crítico es la implementación incompleta de la Ley Nacional de Salud Mental (26.657), condicionada por limitaciones presupuestarias, resistencias al cambio del modelo de atención y déficits en la formación profesional.
Especialistas coinciden en que fortalecer las políticas públicas, ampliar el acceso a tratamientos y reforzar las redes comunitarias de contención resulta clave para revertir esta tendencia.
Líneas de atención y emergencia:
• 135, disponible las 24 horas para atención en crisis y seguimiento.
• Secretaría de Salud Mental, atención y orientación en Adolfo Güemes 650.
• Programa GUIAF para prevención del suicidio: (0387) 4213387.
📌 Publicado por Diario InfoSalta



