Advertencia, petróleo y tensión: Trump exigió la salida de Maduro y endureció su postura

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, lanzó este lunes una advertencia directa al mandatario venezolano de Nicolás Maduro, a quien instó a abandonar el poder de manera inmediata. Durante una conferencia de prensa realizada en el estado de Florida, el jefe de la Casa Blanca evitó confirmar un plan de derrocamiento directo, aunque anticipó consecuencias severas si el líder chavista decide mantenerse en el cargo.

“Sería inteligente que deje el poder”, expresó Trump, y añadió que, en caso de que Maduro “se haga el duro”, enfrentará “severas y duraderas consecuencias”. El mandatario estadounidense sostuvo que una eventual resistencia del gobierno venezolano podría marcar “la última vez” que el presidente caribeño adopte esa postura.

Las declaraciones se produjeron en un contexto de creciente tensión bilateral, marcado por el bloqueo naval y la incautación de buques petroleros sancionados. Trump confirmó que Estados Unidos retendrá de forma permanente el petróleo confiscado a Venezuela, así como las embarcaciones interceptadas. Entre ellas, mencionó un cargamento de 1,9 millones de barriles de crudo incautado el pasado 10 de diciembre.

“Nos lo quedaremos. Puede que lo utilicemos para las reservas estratégicas, y también nos quedamos con los barcos”, afirmó el presidente, al referirse al destino del petróleo y de las naves incautadas en el marco de las sanciones.

Desde Caracas, el gobierno de Nicolás Maduro rechazó las incautaciones y calificó las acciones de la Marina estadounidense como actos de “piratería” internacional. Las autoridades venezolanas anunciaron que iniciarán acciones legales ante el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas para denunciar lo que consideran maniobras ilegales. Mientras tanto, Washington confirmó que mantiene una persecución activa para interceptar un tercer petrolero que navegaba cerca de las costas venezolanas.

Hacia el final de su comparecencia, Trump reveló que mantuvo conversaciones con directivos de petroleras estadounidenses sobre el futuro de la industria energética en Venezuela. También señaló que participará de manera personal en el diseño estético de los nuevos buques de guerra, afirmando que su visión, combinada con la ingeniería naval, permitirá crear una flota sin precedentes.

El intercambio de declaraciones y medidas refuerza el clima de confrontación entre ambos países y vuelve a colocar a Venezuela en el centro de la agenda internacional, en un escenario marcado por sanciones, disputas energéticas y tensiones geopolíticas en el Caribe.

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