Política

SERENELLINI Y STETTLER: EL PREMIO POR MILITAR EL HAMBRE Y LA INESTABILIDAD DE UN GABINETE

La reciente designación del periodista como Secretario de Medios ha puesto de manifiesto cómo “militar a favor del hambre” en tiempos de crisis puede tener sus premios.

Sus comentarios desafortunados en el programa de LN+ junto a Viviana Valles, sobre la necesidad de que las familias se ajusten a una comida fuerte por día por la crisis económica: “Cualquiera de nosotros se recorta en distintas medidas”, dijo Serenellini.

“Uno recortará la plataforma para ver películas, otro recortará el auto, dirá ‘no lo uso más’, y otro, y ese es el que esta grave, dirá ‘no hay desayuno o no hay almuerzo’, obviamente, una comida por día. O sea, en distintos niveles todos estamos recortando”, expresó sin pelos en la lengua el periodista. Como si fuera poco, Valles siguió su razonamiento y además de aprobarlo, amplió la vergonzante reflexión: “Esto te lo digo porque lo escuché: clase media, ¿eh?”, introdujo la locutora y luego parafraseó aquello que supuestamente llegó a sus oídos. “Hago una comida fuerte por día para todos, en general elijo la noche, para que los chicos vayan a la cama y descansen mejor, y después, durante el día, vamos viendo’’. Han desatado una tormenta de críticas, no solo a nivel local sino también entre medios internacionales y periodistas de cadenas hegemónicas.

Por otra parte, se puede evidenciar la tensión que rodea al equipo del gobierno nacional. Esta tensión se intensificó con la sorpresiva renuncia de Belén Stettler, quien ocupaba un alto cargo en el gabinete, vinculada estrechamente a Santiago Caputo, el estratega de campaña considerado el “arquitecto” de la victoria electoral de Milei.

Aunque los motivos detrás de la renuncia de Stettler no se han revelado, la presentación indeclinable de su dimisión plantea interrogantes sobre la estabilidad y cohesión interna del gobierno. Ayer, Infobae confirmó la renuncia y anticipó que los cambios en el gabinete se oficializarán el próximo martes.

La incertidumbre se profundiza al trascender que Stettler, aparentemente, “no había asumido“, a pesar de que el decreto número 16/2023, firmado por Milei y el jefe de Gabinete Nicolás Posse el 12 de diciembre, oficializa su designación formal. Este episodio arroja luz sobre la opacidad y la volatilidad en la toma de decisiones gubernamentales.

En conclusión, la incorporación de Serenellini y la salida de Stettler revelan una vez más las tensiones dentro del gobierno de Milei, sumiendo al gabinete en una nueva etapa de incertidumbre y replanteamiento en medio de una crisis económica que exige respuestas sensatas y concreta, pero lo único que nos venden es un show noventoso rodeado de humo.

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