El gobernador recorrió las áreas afectadas por el devastador incendio en la zona sur de la capital salteña, donde la situación sigue siendo alarmante.
Acompañado por equipos de Defensa Civil y el Ejército, Sáenz observó de primera mano los esfuerzos por contener las llamas. “Esperemos que apacigüe un poco el viento zonda“, comentó, señalando la dificultad que representan los vientos previstos hasta las 4 de la mañana para controlar el incendio.
En su evaluación, el gobernador indicó que los focos “están contenidos, no controlados”, subrayando la necesidad de mantenerse en alerta máxima.
Sáenz enfatizó la responsabilidad de las autoridades de proteger a la población: “Tenemos la obligación de brindarle seguridad a la gente”, afirmó.
El mandatario también informó que, tras experiencias anteriores con incendios, se ha adquirido nueva maquinaria para mejorar la respuesta ante estas emergencias.
Aunque lamentó las pérdidas materiales, Sáenz llevó un mensaje de alivio al confirmar que “afortunadamente no hay víctimas fatales”.
Las autoridades y equipos de emergencia continúan trabajando incansablemente para proteger a los residentes y sofocar el fuego que amenaza la seguridad de los habitantes de la zona sur de Salta.
