La crisis económica y social se profundiza en el Gran Salta, dónde casi el 20% de los residentes se encuentra en la indigencia, según el último informe del Observatorio de la Deuda Social Argentina de la Universidad Católica (ODSA-UCA).
La situación, agravada tras la asunción de Javier Milei, muestra un panorama desolador: el 56,8% de la población de la capital salteña y sus alrededores está por debajo de la línea de pobreza.
Este alarmante escenario se desprende de los datos de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) del INDEC, que reflejan un aumento significativo de la pobreza y la indigencia a nivel nacional.
Mientras que el índice de pobreza en Argentina alcanza el 54,9%, la indigencia se sitúa en el 20,3%, con cifras que superan ampliamente los registros de 2023, cuando la pobreza era del 45,2% y la indigencia del 14,6%.
Además la UCA destaca que la situación se agrava especialmente hacia el interior de la provincia de Salta, dónde la falta de empleo y oportunidades económicas es aún más marcada.
Pero esta problemática no es exclusiva de Salta, ya que se observa un aumento generalizado de la pobreza en regiones como Gran Resistencia, Chaco, donde el 79,5% de la población es pobre y el 38,6% indigente, y Formosa, con un 72% de pobreza.
El informe subraya que las continuas devaluaciones del peso y el impacto inflacionario, sin una correspondiente actualización de los salarios, son factores determinantes en este deterioro social.
La comunidad salteña enfrenta una crisis que requiere respuestas urgentes para mitigar el sufrimiento de miles de personas que hoy no pueden cubrir sus necesidades básicas.
