El 1º de Mayo, altavoz reivindicativo de la clase trabajadora
La fecha quedó enmarcada hace 132 años tras una protesta histórica en Chicago, Estados Unidos.
El Primero de Mayo de 1886, 132 años atrás, en Chicago, Estados Unidos, los obreros de unas 5 mil fábricas se lanzaron a las calles para reclamar por la jornada laboral de ocho horas y así se configuró el multitudinario mitin de Haymarket Square, donde la policía cargó contra ellos dando muerte a seis, hiriendo a muchos y deteniendo a una gran cantidad.
En esa circunstancia, fue lanzada una bomba contra los policías dando muerte a ocho; al parecer se trató de una provocación instrumentada por la compañía de seguridad privada Pinkerton que justificó la represión y el juzgamiento de ocho dirigentes anarquistas.
Fueron acusados los periodistas August Spies, alemán, Adolph Fischer, alemán, y Albert Parson, estadounidense; los gráficos alemanes Michael Schwab y Georg Engel; el carpintero Louis Linng, alemán; el vendedor de comercio Oscar Neebe, estadounidense, y el obrero textil y pastor metodista Samuel Fielden, británico.
El 11 de noviembre de 1887 fueron ejecutados Parsons, Spies, Fischer y Engel; Linng se había suicidado en prisión; a Schwab y Fielden se los condenó a prisión perpetua; y a Neebe a 15 años de trabajos forzados. Son ellos los que la historia conoce como “Mártires de Chicago”.
Por entonces, la jornada laboral superaba las 12 horas diarias frente a lo cual el movimiento mundial por las de ocho horas adquirió características orgánicas cuando en el congreso de la luego llamada Primera Internacional, por entonces la Internacional Socialista, de 1884, se determinó que “la limitación legal de la jornada de trabajo es una condición preliminar sin la cual han de considerarse fallidos todos los intentos ulteriores por mejoras y por la emancipación de la clase obrera”.
Ese criterio caló en el IV Congreso de la “American Federation of Labor” del mismo 1884, la cual, tras los fracasos de más de un año en las negociaciones con gobernantes y representantes patronales, convocó a un paro general de actividades para el primero de mayo de 1886.