Metán | Recordaron el encuentro entre Belgrano y San Martín en Yatasto
Para conmemorar la fecha se realizó una cabalgata histórica de los gauchos por el Camino Real y un acto oficial en la casona del paraje.
Metán-. Con profundo sentimiento patrio, se conmemoró el domingo el encuentro entre el general Manuel Belgrano y el entonces coronel José de San Martín en la casa histórica de Yatasto, hecho ocurrido un 20 de enero de 1814.
Para conmemorar la fecha hubo una cabalgata histórica que se inició en plaza San Martín de San José de Metán, con un nutrido grupo de gauchos, quienes fueron homenajeando a los héroes que iniciaron la lucha por la independencia argentina desde este lugar emblemático.
Con la presencia del coordinador de Intendencia, Alejandro Etchart; funcionarios municipales, integrantes de los fortines gauchos de la zona, el presidente de la Agrupación Gauchos de Gemes de Salta, el director del Cabildo de Salta, el intendente de Parque El Rey, y los vecinos y turistas se inició el acto con el izamiento de las banderas, la entonación de los himnos y la marcha a Malvinas. Luego se realizó la colocación de ofrendas y hubo un minuto de silencio.
Luego fue el turno de la palabra y, quien se refirió a la fecha, fue el gaucho Nicolás Giménez, quien exaltó la importancia de la unión de los ciudadanos cerrando las grietas existentes, la importancia del ser gaucho y el trabajo que se debe seguir realizando por los valores.
El presidente de la Agrupación de Salta, Francisco Aráoz, también habló sobre la revalorización de las fechas históricas y la educación, temas sobre lo que afirmó: “Se debe transmitir a los más jóvenes para que imiten esas acciones heróicas”.
Cumpleaños del Fortín Yatasto
Por otra parte, el Fortín Posta de Yatasto festejó en ese día sus 48 años de vida. Hicieron entrega de reconocimientos a dos gauchos que transitan desde hace muchos años las filas del fortín, llevando en alto las tradiciones locales.
Los homenajeados fueron José Guillermo Ibarra y Francisco Ontiveros.
En el final, la danza llegó de la mano de los integrantes del Fortín Posta de Yatasto y del Centro de Jubilados Posta de Yatasto .
Luego, en el salón de la capilla Nuestra Señora de las Nieves se realizó un asado de camaradería con gauchos y amigos, y se festejaron los 48 años de vida del Fortín Posta de Yatasto.
La historia
El general Belgrano venía con su ejército en retirada desde el Alto Perú, debido a la gran derrota que tuvo en la batalla de Ayohuma. Por ello el Gobierno de Buenos Aires decidió reemplazarlo en el mando del Ejército del Norte. De esa manera fue designado el entonces coronel don José de San Martín para asumir esa jefatura.
Por esa causa San Martín llega a esta zona con refuerzos para el ejército el 16 de enero de 1814 y es hospedado en la entonces llamada sala de la familia Toledo y Pimentel, en Yatasto. “Desde este lugar el coronel se dirige el 17 a la Posta de Los Algarrobos, situada muy cerca del actual pueblo de Lumbreras, para entrevistarse con el general Belgrano, que se encontraba en la ribera norte del río Pasaje, hoy Juramento. No se conocían. Entran en contacto personal el 19 de enero en ese lugar. Belgrano cruzó el río y allí se produjo el primer encuentro. Se estrecharon en un histórico abrazo”, relató el historiador, Eduardo Poma.
Explicó que ambos próceres compartieron sus primeras experiencias en el trato mutuo y deciden continuar la reunión al día siguiente en la sala de Las Juntas de Yatasto, que pertenecía a la familia Torrens.
“Esa sala actuaba como posta no oficial y estaba a unos dos kilómetros hacia el este de la sala de los Toledo y Pimentel, donde se hospedaba San Martín. En esa época las postas oficiales eran la de Rosario de la Frontera y la de Conchas, en Metán, que habían sido instaladas en 1772 por el viajero y escritor que firmaba con el nombre de Concolorcorvo, cuando realizó su conocido viaje desde Buenos Aires a Lima con ese propósito. Esta fue la reunión más importante porque San Martín recibió de Belgrano el mando del Ejército del Norte, aunque en forma extraoficial, porque el traspaso mediante el protocolo necesario se haría un tiempo después en San Miguel de Tucumán”, señaló el historiador.
Fuente: El Tribuno