Caso Píparo: Allanaron el Centro de Monitoreo platense y piden la imputación de su marido por intento de homicidio

La Policía bonaerense allanó el centro de monitoreo de la Municipalidad de La Plata para secuestrar las grabaciones de las cámaras de seguridad así como los libros de guardia de la madrugada del 1° de enero.
El operativo se da en el contexto de la investigación sobre el robo denunciado por Carolina Píparo y Juan Ignacio Buzali, y el posterior choque contra dos motociclistas. Además, se presume que las imágenes que trascendieron fueron editadas para favorecer a la diputada macrista.
El allanamiento al Centro de Operaciones y Monitoreo (COM) estuvo a cargo de agentes de la Dirección Departamental de Investigaciones (DDI) platense que actuaron en cumplimiento de la orden de la justicia para hacerse con las imágenes fundamentales para el expediente judicial.
Durante el operativo se tomaron las imágenes de las cámaras de seguridad en tanto los jóvenes víctimas de Píparo y su pareja denunciaron que las imágenes habían sido editadas con el fin de favorecer a la legisladora de Juntos por el Cambio.
Por otra parte, fuentes judiciales confirmaron que “se peticionaron las grabaciones de las cámaras de un cuadrante más amplio, que abarca las dos arterias donde ocurrieron los hechos con el fin de evaluar cualquier posibilidad”.
Por otra parte, según publica Télam, desde el poder judicial manifestaron que “no hay absolutamente ningún indicio” que relacione a los motociclistas con el robo denunciado por Píparo y Buzali.
Del mismo modo, trascendió que la fiscal a cargo del expediente, María Eugenia Di Lorenzo, posee un video en el que se ven los posibles autores del asalto, los cuales están en proceso de identificación.
Pedido de detención para la pareja de Píparo
En primeras horas de la mañana de hoy, los letrados que representan a los motociclistas atropellados pidieron al Juzgado de Garantías 5 de La Plata, a cargo de Marcela Garmendia, la detención de Juan Ignacio Buzali argumentando la existencia de “peligros procesales”.
“Atento al comportamiento desplegado por Juan Ignacio Buzali en el acontecer de los hechos, quedó demostrado su desprecio total por el derecho, poniéndose en fuga luego de atropellar a las víctimas, esto constituye un peligro cierto de fuga”, expresó Martín De Vargas, abogado de uno de ellos.
Además agregó “la existencia de funcionarios públicos asistiéndolos” luego del siniestro da cuenta de que “existe entorpecimiento en la investigación, ya que han utilizado influencias para evitar ser detenidos y también evitar el control de alcoholemia”.
De Vargas refirió dos situaciones irregulares:
- La presencia casi inmediata del Secretario de Seguridad municipal en el lugar del hecho
- La falta de un test alcoholemia inmediato para la pareja de Buzali, que luego se supo estaba alcoholizado.
“Dada la existencia de esos peligros procesales, para asegurar la finalidad del proceso penal”, De Vargas solicitó al juzgado “que pida la detención de Buzali” y el apartamiento de la jueza Garmendia, madre de Juan Manuel Martínez Garmendia, parte del gabinete del Municipio que gobierna Julio Garro, como también lo son Píparo y el secretario de Seguridad Darío Ganduglia.
Piden imputar a Buzali
Por otra parte, Rodolfo Baqué y Juan Fontana, abogados de otro de los motociclistas, pidieron que se impute a Buzali por el delito de doble homicidio en grado de tentativa, argumentando “no se trató de un accidente de tránsito”.
Baqué maniestó que el esposo de la diputada quiso “provocar una lesión a dos ladrones armados”, pidiendo su “inmediata detención”. “Buzali ha tenido una clara intención de causar la muerte” de los motociclistas, escribió en el escrito presentado ante la Jueza de Garantías.
“Entendemos que el señor Buzali, al impactar de manera artera, traicionera e intencional en la parte trasera de la moto a una velocidad excesiva (…) tuvo como finalidad acabar con la vida de los mencionados, motivado, por la sed de venganza y la ira al considerarlos autores del robo que habían sufrido él y su esposa, más de 70 minutos antes”.
“Buzali y Píparo creían que los jóvenes eran peligrosos ladrones armados, por lo que al presumir que portaban armas de fuego, Buzali los embistió con la clara intención de matarlos”, agregó Baqué.
También argumentó “al entrar en error, quisieron meter presos a dos perejiles inocentes e instalarlos mediáticamente como culpables cuando se trata de chicos trabajadores que estaban mirando la quema de muñecos de fin de año con otras 12 personas más”.
En otro tramo del escrito plantean que posteriormente intentaron “darse a la fuga” aunque no lo lograron “por la decidida persecución que le realizan motociclistas amigos” de las víctimas. El Agora