Sube el pan: empresarios se justifican por inflación de costos
El kilo de pan tendrá una variación de hasta 17%. Se resolvió en una reunión secreta entre el secretario Pollera y autoridades empresarias.
Para afrontar lo que falta de julio y todo el próximo mes, el Gobierno encontró un poco de alivio. Este martes en una cumbre con el sector empresario se cerró un acuerdo para que el kilo de pan aumente entre 10% y 17%.
Si bien se había especulado con que el kilo de pan podría alcanzar los 400 pesos, esto significa que el flamante secretario de Comercio, Martín Pollera, culminó una negociación ya avanzada, y desde el “techo” actual de 290 pesos, el kilo de pan pasará a una franja que “va de 320 a 340 pesos”, puntualizó a BAE Negocios el presidente de la cámara FAIPA, Miguel Di Betta.
No se fijó un plazo porque el grado de incertidumbre es tal que la mesa del pan quedó abierta, para dialogar en todo momento, apuntaron otras fuentes. Ante la escalada de aumentos entre la harina y grasas, margarinas, y otros insumos, “era imposible sostener los mismos valores”, añadió Di Betta.
Como adelantó este medio, la reunión se efectuó hoy en las oficinas de Diagonal Sur, y a la resolución se alcanzó en un par de horas.
Fideicomiso
Respecto al funcionamiento de la harina subsidiada y el comportamiento de los industriales, “el Gobierno nos dijo que por estas horas pasamos de 4 a 12 molinos y en pocos días se llegará a los 20 molinos”.
Di Betta planteó además que el segmento comercial debería tener una ayuda vía subsidio de la luz /yo gas, porque las remarcaciones son constantes. “Por el lado de los costos, faltan algunas medidas para que estemos mejor”, sostuvo.
Desde la Federación Industrial Panaderil de la provincia de Buenos Aires aseguraron que no están recibiendo las harinas a precios subsidiados, como contempla el Fondo Estabilizador del Trigo Argentino que impulsó el Gobierno, pero saben que “va a llegar en breve”. Dirigentes de la entidad explicaron que, al no estar recibiendo la harina más barata, como lo contempla ese Fondo, no tienen otra alternativa que trasladar sus mayores costos al mostrador.
“La comunicación oficial trae calma y pone un poco de orden porque los precios realmente están retrasados”, expresó el titular de Faipa.
No obstante, destacan que el consumo no cayó porque el pan es un alimento clave dentro de la canasta básica. A su vez, las empresas molineras argumentan que el Gobierno no les está pagando los subsidios que contempla el Fondo. “El subsidio es lo único que contenía el precio. Si no hay harina subsidiada no hay precio subsidiado”, agregó otra fuente sectorial.