LA NOVIA DE FERNANDO BÁEZ SOSA SUFRIÓ ESTRÉS POST TRAUMÁTICO Y NO DECLARÓ

Los fiscales confirmaron que la joven no se encuentra en condiciones emocionales de hablar ante los jueces. Por este motivo, su padre Oscar, lo hizo en su lugar.
Julieta Rossi decidió no estar presente en el juicio a los ocho rugbiers acusados de asesinar a golpes en 2020 a su novio, Fernando Báez Sosa. Su testimonio estaba agendado para la jornada de hoy martes en el Tribunal N°1, pero los abogados de la querella liderada por Fernando Burlando afirmaban ayer que Julieta se ausentaría, al estar profundamente nerviosa y movilizada por la situación.
Oscar, su padre, fue quien se sentó en el banquillo para declarar. Aseveró que tuvo en su mano la camisa negra ensangrentada que vistió Fernando cuando lo asesinaron a golpes, que vio el cadáver de Báez Sosa tras la autopsia, y que acompañó a su consuegro a realizar los trámites del sepelio.
En la madrugada del 18 de enero de 2020, Julieta se encontraba dentro del boliche “Le Brique” cuando Fernando y sus amigos fueron expulsados del local por un presunto “empujón” con el grupo de rugbiers acusados y que después fueron atacados en la vereda de enfrente.
Hoy, tres años después, Julieta no reiteró su testimonio en el proceso que puede terminar con los agresores de su novio condenados a prisión perpetua.