El primer mandatario salteño expone maniobras y llama a terminar con privilegios en el sector del tabaco.
El gobernador Gustavo Sáenz, ha sacudido el panorama político al revelar presiones recibidas del lobby tabacalero en medio de la discusión sobre el impuesto al tabaco.
En una entrevista con Radio Rivadavia conducida por Marcelo Longobardi, Sáenz manifestó su indignación y reafirmó su posición en contra de retirar modificaciones al Impuesto Interno al Tabaco del Capítulo Fiscal de La Ley Bases.
Visiblemente molesto, el salteño expresó: “Me produce vergüenza y bronca, y tengo que reaccionar y hacerlo como Gobernador de una provincia tabacalera”.
También criticó duramente a los legisladores por no consultar a Salta sobre una decisión que impacta directamente en su economía regional.
En un momento de la entrevista sobre presiones del lobby tabacalero, Longobardi contó que a su teléfono personal le llegó un mensaje de texto para que “no se meta”. A esto, el Gobernador salteño se solidarizó y confesó que sin hablar de amenazas, recibió “consejos” para callarse la boca.
A la pregunta si tiene miedo por su integridad física y la de su familia, Sáenz dijo: “El miedo paraliza y no me permitiría hablar y seguir planteando que se trate este capítulo fiscal”.
Finalmente, insistiendo con su posición para terminar con los privilegios.
“Es una vergüenza y espero que esto se resuelva y vuelva a incorporar el Capítulo Fiscal, – lo puede pedir cualquier diputado – que se trate, se vote, den la cara y fundamentalmente, sea el Congreso el que determine si este privilegio se mantiene o no. A todas luces es injusta esta situación”, remató el gobernador.
En medio de estas denuncias, Sáenz instó a resolver la situación y reincorporar el Capítulo Fiscal para que el Congreso pueda determinar si se mantienen o no los privilegios en el sector tabacalero.
Concluyó su intervención reafirmando su posición en contra de los privilegios, calificando la situación como “injusta“.
La denuncia del Gobernador Sáenz arroja luz sobre las prácticas del lobby tabacalero y pone de manifiesto la necesidad de transparencia y equidad en las decisiones legislativas.