Dengue, pobreza, coronavirus y olvido: “El Estado nunca se ocupó de los pueblos indígenas”

- Por: Emi Alonso para Que Pasa Salta
El coronavirus, claramente, no es el mayor, ni el único problema de las comunidades originaras en el norte de la provincia de Salta. Apenas decretada la Emergencia Sociosanitaria, la llegada del COVID-19 pondría emergencia sobre emergencia y la realidad de la población indígena no cambiaría mucho. Octorina Zamora, referente de la comunidad wichí, dejó en claro la situación del norte en pocas palabras: “El Estado nunca se ocupó de los pueblos indígenas”.
El peor flagelo que vivió nuestra provincia tuvo un doloroso pico este año. Según una causa que descansa en algún cajón de la Justicia local, 25 niños murieron víctimas del hambre y de la más cruda pobreza, más de 40 chicos recibieron la contención en el Centro de Recuperación Nutricional de Tartagal, hoy un acceso más al hospital con la excusa más repetida, la pandemia.
En este sentido, Octorina Zamora aclaró: “Yo reclamo porque los niños no tienen ellos la voz para reclamar por sus derechos. Yo soy mamá y abuela wichí. No tiene que estar ajeno el resto de la sociedad cuando se pelea por los derechos de los niños”.
La referenta dejo en claro que la amenaza para el pueblo indígena no es una sola, que el coronavirus se disputa con el dengue, la pobreza y la indiferencia de los sucesivos gobiernos la extinción definitiva de nuestras comunidades. “Además del coronavirus tenemos el flagelo del dengue. Ya no hay insumos para hacer los estudios a las personas que llegan al hospital. Una piensa que dejan que entre el virus, que entren las enfermedades a propósito, porque es la otra arma, el arma moderna del genocidio”, disparó.