Metán. Vecinos del barrio Wichi nuevamente denuncian abuso policial

Uniformados en motocicleta volvieron al barrio Misión Aborigen ayer por la mañana, según los vecinos del lugar: “golpearon y se llevaron detenidos a dos jóvenes, Cristina Chávez de 17 años es epiléptica por lo que fue trasladada a su domicilio para cumplir arresto domiciliario, pero su hermano René de 22 años agredido por la motorizada aún sigue incomunicado”. Los hermanos están afrontando los siguientes cargos: resistencia a la autoridad, daños y lesiones a personal policial, entre otros. El martes serán imputados.
Fatima, madre de los adolescentes aseguró que “le pegaron esposado a uno de sus hijos, mientras personal masculino se llevaba de los pelos a la menor, ‘no les importó que esté yo viendo cómo maltrataban a mis hijos, a una vecina que gritaba para que no les peguen le dijeron: cállate mataca hdp o te vamos a llevar a vos también’, mi hija está golpeada, la soltaron porque es epiléptica’”.
La escalada de violencia con la que se maneja las fuerzas de seguridad en contra este barrio en particular se hizo moneda corriente, es por eso que los vecinos cansados del abuso continúo de autoridad, decidieron hacer justicia por su cuenta y comenzaron a apedrear el móvil policial y a los efectivos para que, según ellos, dejaban de golpear a los hermanos detenidos.
Cabe resaltar que Valeria Zambrano técnica en abordaje territorial del Institutos de Asuntos Indígenas -INAI- a cargo de Magdalena Odarda ya está trabajando para que René obtenga la liberación inmediata.
La semana pasada la Jefa de la Policía Nancy Olivera llamo a Braulio Cuellar (cacique de la comunidad) para pactar una “reunión”, el respondió que quería que ese encuentro sea registrado, entonces la respuesta fue que se postergaba para este 29/05.
El pasado 02 de mayo otros dos jóvenes wichis fueron detenidos en medio de una represión en esa barriada por parte de Infantería, luego de una semana de estar incomunicados recobraron la libertad gracias a la gestión e intervención de Zambrano.
Los muchachos estaban muy golpeados al momento de ser liberados.