Con la celebración del Inti Raymi, Salta conmemora el nuevo año Andino
La ancestral ceremonia del Inti Raymi se realizó en el predio de la Pachamama, ubicado en la esquina de avenida Hipólito Yrigoyen y San Martín. Se trata de una fiesta andina que se celebra en honor al Inti (dios del sol) y se realiza en el mes de junio en cada solsticio de invierno.
La actividad comenzó a las 08:00, con la despedida de Mama Killa (luna), dando recibimiento a Tata Inti (sol). El ritual culminó con el sahumado de los participantes.
El Inti Raymi es una antigua fiesta religiosa Inca, donde le rendían culto a su Dios: “El Inti o Sol”. En su cultura Inti, significa “Sol” y Raymi, significa “ceremonia” o “fiesta”. Entonces el Inti Raymi es la fiesta del sol, se realiza en agradecimiento a la Allpa Mama (madre tierra) por las cosechas recibidas.
Al tratarse de una tradición incaica, la celebración se mantiene como un rito para muchas comunidades indígenas de legado incaico, algunas de las cuales están asentadas en otras partes del antiguo territorio inca, como en Perú, Ecuador, Bolivia, Argentina, Colombia y Chile.
Son cientos los indígenas de diversas naciones que encomiendan su siembra y espíritu al sol, pidiendo abundancia y sanación. Sin embargo, la historia marca que desde la llegada de la colonia a estas tierras, y en Salta en particular, la Iglesia Católica se encargó de invisibilizar una de las festividades más importantes para las poblaciones indígenas.
Es posible hacer esta afirmación porque el Inti Raymi se festeja desde el 21 hasta el 24 de junio, marcando el inicio del solsticio de invierno en el hemisferio sur. El último día de esta celebración coincide con la Fiesta de San Juan, también llamada víspera de San Juan o Noche de San Juan, que fecha cristiana que recuerda el nacimiento de San Juan Bautista, el 24 de junio.
Según la cosmovisión kolla, la ceremonia del Inti Raymi es una jornada de reflexión, donde se hacen lecturas y se contemplan los procesos nocturnos que se ven en esas horas. “Es una mirada de producción de cambios climáticos”, destacó en Salta/12 Adelina López, del Pueblo Kolla, quien vive en la localidad de Iruya. Reiteró que al ser una celebración que se fusionó en gran medida con el catolicismo, son muchas las personas que no están atentas a esos cambios climáticos que pueden verse y analizarse en la noche del 21.
A pesar de la ausencia de celebraciones durante el solsticio de invierno en las comunidades kollas, no se perdió el respeto al Tayta Inti, ya que se lo celebra durante todo el año, y en cada encuentro colectivo que se presente. Es que para la cosmovisión andina, permanentemente se debe destacar la complementariedad, tienen que estar presentes los dos polos: el frío y el calor.