Tras una relación de dos años con la víctima, el hombre se enfrenta a una condena por actos violentos y amenazas.
En un reciente juicio en El Galpón, la fiscala penal de Violencia Familiar y de Género de Metán, Susana Redondo Torino, representó al Ministerio Público Fiscal, resultando en una condena que ha generado gran interés. El Juez Sebastián Fucho de la Sala II del Tribunal de Juicio, Distrito Judicial del Sur, dictaminó una pena de dos años de prisión de ejecución condicional para un hombre de 45 años.
El individuo fue hallado culpable de cometer lesiones leves doblemente agravadas debido a su relación de pareja y la convivencia, así como por la mediación de violencia de género. Además, se le acusó de amenazas y amenazas con arma, en concurso real.
La denuncia que dio inicio a este caso fue presentada por su expareja, con quien compartió una relación de dos años y convivieron junto a los dos hijos de ella, uno de los cuales también presentó una denuncia por amenazas. La víctima relató que el 6 de diciembre de 2020, durante una disputa de pareja, el hombre la agredió físicamente, propinándole golpes en el rostro y sujetándola con fuerza del brazo derecho.
Cuando el hijo mayor de la denunciante intentó intervenir para protegerla, el agresor sacó un machete y lo persiguió amenazándolo. La mujer declaró haber sufrido durante un tiempo violencia tanto física como psicológica, y las lesiones fueron corroboradas por un profesional médico que la atendió en el hospital.
La fiscala Redondo Torino destacó la vulnerabilidad de la víctima y la dinámica de control y sumisión que prevaleció en la relación. Como parte de la sentencia, el juez Fucho impuso al condenado una serie de normas de conducta, que incluyen la prohibición de ejercer cualquier tipo de violencia, proferir insultos o palabras agraviantes contra los dos denunciantes.