BEBÉ ABANDONADO EN EL MATERNO, CON POCAS EXPECTATIVAS DE VIDA, SERÁ ADOPTADO POR UNA DE LAS ENFERMERAS QUE LO CUIDA
En ese hospital, un niño internado encontró un nuevo camino hacia el amor y la estabilidad: fue entregado en guarda con fines de adopción.
El viernes fue una jornada cargada de emociones porqué el hospital Materno Infantil fue testigo de una audiencia judicial singular, presidida por la jueza de Personas y Familia de primera instancia Tercera Nominación, Claudia Güemes.
Desde su nacimiento, este pequeño ha luchado contra una enfermedad que lo ha mantenido en las paredes del hospital, lejos de una vida autónoma.
Abandonado por su familia biológica, su futuro parecía incierto hasta que un vínculo especial se forjó en el corazón del nosocomio.
Una joven enfermera, cuya dedicación y amor por el niño no conocen límites, se convirtió en su rayo de esperanza. Acompañándolo día a día, supliendo sus necesidades y brindándole afecto, esta trabajadora de la salud se ha convertido en la familia de este niño.
Conocedora de la gravedad de la situación médica del bebé, la enfermera ha dado un paso valiente al solicitar adoptarlo como madre soltera porqué su novio trabaja en Tartagal.
Cabe mencionar que la familia de la joven enfermera también comenzó a visitar al pequeño y vincularse como parte de su núcleo seguro.
En este proceso judicial tan significativo, múltiples actores han intervenido para asegurar el bienestar del niño, desde la Secretaria Tutelar hasta el Fiscal Civil.
